En el mes del orgasmo femenino es increíble pensar como a pesar de estar “inundados” por tanta información y posibilidades de aprender de tantos temas, aún tengamos tantas mujeres que se pregunten cuestiones como, ¿cómo sé si he tenido un orgasmo? ¿Yo tendré punto G? ¿Seré muy mala si tengo más ganas de tener sexo que mi pareja? ¿Qué pensará de mí si me acuesto en la primera cita o si después de mucho tiempo propongo un juego sexual diferente?
Por eso hoy, quiero hablarles de 5 claves para empezar a cambiar el esquema de vivir nuestra sexualidad por lo que nuestras parejas puedan hacer por nosotras y empezar a vivirla por lo que nosotras mismas podemos lograr.
1. Empoderarse de tu propio placer. ¿Cuántas veces dejamos nuestras sensaciones a merced de tener pareja y cuando la tenemos, a merced de la misma? Esta percepción es una de las mas nefastas, porque dejo el disfrute en manos de otro, de lo que conozca o pueda leer en mi y me niego la posibilidad de explorar mi propio cuerpo y entender cuales son mis puntos del placer, cómo me gusta y dónde me gusta.
Si tú te conoces, serás capaz de llegar mas fácil a un pleno disfrute de tu sexualidad, sea sola o con pareja.
2. Deshacerse de falso aprendizajes. ¿Estás segura que lo que tu consideras “normal” en tu sexualidad así lo es? Solo el 4% de los padres educa sexualmente a sus hijos, lo que nos da una cantidad de aprendizajes de fuentes distorsionadas (los amigos, internet, revistas, etc…) lo que hace que tengamos paradigmas en nuestra sexualidad, que solo después de muchos momentos difíciles, educación y reflexiones logramos cambiar.
Por ejemplo, aquella mujer que piensa que el orgasmo es solo una eyaculación femenina y que si no la logra no está completa y solo a través de educarse aprender que orgasmos hay muchos y pueden llegar de muchas maneras y no por no tener una eyaculación está incompleta.
Las auto-restricciones o metas inalcanzables llevan a una frustración y en consecuencia no se logra disfrutar como se debe la actividad sexual.
3. Tomarse la sexualidad como debería ser, una decisión propia, sin contar con las opiniones de los demás. Siempre digo, en sexualidad lo único que no es valido es lo que la pareja decida que NO es valido en su relación. Si mi pareja y yo decidimos ser abiertos en nuestras relaciones sexuales sin que esto afecte la relación, ¿Qué le puede importar a los demás la forma como nosotros vivimos el tema? ¡en nada! Si yo decido tener relaciones sexuales con alguien que me gusta mucho en la primera, segunda o tercera cita, ¿A quién diferente a mi, puede importar esto?
Decide por ti, siente por ti, toma tus decisiones por ti, no por lo que otros piensen o vayan a decir, cuando te quitas este chip, inevitablemente empezarás a ver la sexualidad de otra forma
4. Reconectate con sus fantasías eróticas. La capacidad de sentir deseo sexual está directamente relacionada con la capacidad de tener fantasías sexuales y no necesariamente deben ser las mas alocadas, puedes usar también ideas de encuentros sexuales del pasado que te estimulen y encaminen hacía incrementar el deseo y excitación sexual.
Vuele a soñar despierta.
5. Disfrutar el camino y no solo la meta. Enfócate en tus 5 sentidos, en lo que siente tu piel, tu olfato, lo que oyes, deja a un lado las preocupaciones sobre como se ve tu cuerpo o de tu vida cotidiana, eso puede esperar, déjate llevar por el momento de placer que estás viviendo y disfrútalo al máximo.
Cuando nos dejamos de enfocar en el orgasmo y nos dejamos ir por todo lo anterior, el juego previo, el coqueteo y demás, nos damos la oportunidad de gozar de cada segundo del camino, en vez de solo el final.
La invitación es a vivir la vida de una manera acorde a lo que tu pienses y tomar las riendas de tu placer.